Skip to main content

Entérate por qué el gavilán caracolero cubano está a punto de extinguirse

El gavilán sonso, guaraguao o gavilán caguarero (Chondrohierax wilsonii) es un ave accipitriforme (rapaz diurna) endémica de Cuba y está en peligro crítico de extinción. (Wikipedia).

Es considerado el gavilán más raro en la isla y un pariente muy cercano del milano picogarfio, (Chondrohierax uncinatus) que habita en América Central y América del Sur, al punto de que algunos científicos consideran al cubano una subespecie de dicha ave y lo clasifican como (Chondrohierax uncinatus wilsonii).

Si nos adentramos en el nombre científico nos enteramos de qué Chondrohierax es un término griego que significa “gavilán cartilaginoso”, mientras que wilsonii se refiere al nombre Wilson.

Ahora, el apelativo caguarero viene de la lengua aborigen taína y se deriva de la palabra caguará que quiere decir “caracol grande”, de lo cual se deduce que gavilán caguarero es igual a gavilán caracolero. Mientras que guaraguao, término de la misma lengua indígena designaba a otras aves rapaces.

Por su parte el calificativo de sonso parte de que estos gavilanes eran muy mansos ante la presencia humana. La denominación en inglés es Cuban Kite o Hook-billed Kite.

Esta ave que solo nace en Cuba, solo se reportaba en las montañas de Sagua-Baracoa en las provincias de Holguín, Santiago de Cuba y Guantánamo. Sin embargo estudios recientes parecen indicar que su habita se ha reducido muchísimo más, pues hoy la especie está confinada a una pequeña zona del oriente cubano, entre Moa y Baracoa, se cree que el Sendero Ecológico El Guafe, perteneciente al Parque Nacional Desembarco del Granma y tal vez a alguna

En el siglo XX sólo se reportaba en los sistemas montañosos de Sagua-Baracoa en las provincias de Holguín, Santiago de Cuba y Guantánamo. Estudios recientes parecen indicar que la especie está confinada a una pequeña zona en el oriente de Cuba, entre Moa y Baracoa, y posiblemente algunas otras partes de las de la primera y la última provincias citadas.

Tiene un pico fuerte y muy ganchudo (similar al de los loros), que es blanco amarillento, mientras que su base es de un color azul oscuro que se extiende también a la cara. Posee una cola larga, con cuatro fajas transversas anchas, casi negras. Sus alas extendidas exhiben las plumas primarias con barrados blancos y oscuros muy distintivos. El iris del ojo es blanco-azuloso y las patas de un anaranjado-pálido. El macho es azul-ceniciento en el dorso y hacia la cabeza más pálido. Visto desde lejos, por debajo luce blancuzco.

En la hembra el dorso es castaño-negruzco y por la parte inferior es blancuzca con plumas de tres barras transversas castaño-rojizas. Las hembras que no han llegado a la adultez tienen el dorso salpicado de motas blancas.

Los gavilanes caguareros viven en parejas, cerca ríos en los bosques de galería, ubicados a una altura inferior a los 500 metros sobre el nivel del mar. Se alimentan de caracoles como la Zachrysia, Corida, Veronicella y Polymita, esta última también en peligro de extinción.

La reducción de su hábitat se debe primero a los campesinos que los eliminan porque odian a las rapaces que devoran a sus aves de corral y no saben diferenciar a este caracolero manso y fácil de cazar del resto de los gavilanes. A esto se suma la disminución de los caracoles que constituyen su principal dieta, los cuales son comidos por los cerdos que están libres en las áreas protegidas y también usados con fines comerciales estéticos.

Para protegerlos se educa a los pobladores para concienticen la importancia de preservar esta ave y también los caracoles que le sirven de alimento, y se ha incorporado a los maestros de escuelas en esas montañas y se les han enviado fotos e información sobre el Chondrohierax wilsonii y qué hacer para conservar esta preciada ave cubana de la desaparición total.