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Iguana cubana

El reptil cubano que protege Estados Unidos

Gigante, carismático, robusto y de cola gruesa anillada, con una hilera de espinas en posición vertical que se extienden desde su cabeza hasta la punta de la cola, no te será difícil imaginarte a la iguana cubana.

Es uno de los lagartos de mayor tamaño del Caribe y también de los más amenazados. Su población ha disminuyó drásticamente porque han ido perdiendo su hábitat por causa de la actividad agrícola y la proliferación de animales "cimarrones" o sea especies domésticas que se volvieron silvestres y los cazan indiscriminadamente.

Afortunadamente se han establecidos varios programas de conservación y la cría en cautiverio que han permitido una recuperación en el número de ejemplares, estudiar a estos magníficos animales y utilizar el mismo modelo para proteger a otros lagartos del Caribe que se hallan en peligro de extinción.

El tamaño promedio de este imponente lagarto de la Mayor de las Antillas es de 40 centímetros, desde el hocico hasta la base de la cola. Pero contén aún tu sorpresa porque esa cifra no es nada comparada con la longitud que han llegado a alcanzar algunos ejemplares avistados en la reserva de vida silvestre de la Base Naval estadounidense de la Bahía de Guantánamo, en la más oriental de las provincias cubanas. Allí se han observado aisladamente algunos machos que miden cuatro veces más que dicho promedio. Como lo lees. Nada menos que 160 centímetros y las hembras alcanzan el 75 por ciento de ese tamaño, o sea unos 120 cm.

De hecho, el director de Conservación del Zoológico de San Diego, Allison Alberts, uno de los principales investigadores de esta especie en Cuba, expresó que no se completaba un turno de servicio en Guantánamo sin que se pudiese admirarse alguno de “estos gigantes de aspecto prehistórico”.

 

Iguana cubana

 

Las leyes cubanas protegen a la iguana y en Estados Unidos, están preservadas por el Endangered Species Act o Ley de especies en peligro de extinción.

Existe un curioso episodio relacionado con la iguana cubana que sirvió para persuadir a los jueces del Tribunal Supremo del país norteño para que admitiera el caso de doce prisioneros de Kuwait que se hallaban en el centro de detención estadounidense en la Base Nabal de Guantánamo, sin cargos, ni acceso a abogado, ni juicio.

Resulta que el abogado norteamericano Tom Wilner argumentó que cualquier persona, incluso un oficial del gobierno federal, que violase el Endangered Species Act, lastimando a una iguana en Guantánamo, podía ser no solo multada, sino también enjuiciada y que en cambio el gobierno exponía como justificación que la Ley de los Estados Unidos no era aplicable "a la protección de prisioneros allí". Este argumento convenció a los jueces de la Corte Suprema y se admitió el caso.

Hay muchas más cosas que sorprenden de estos increíbles lagartos. Poseen un curioso dimorfismo sexual que consiste en que los machos además tener una dimensión mucho mayor, poseen unos poros agrandados en el fémur a través de los cuales liberan feromonas con las que atraen a la pareja y marcan su territorio.

Están dotadas de una excelente visión que les permite detectar formas y movimientos a gran distancia, tienen una agudísima percepción del color, al punto de que capaces de ver la radiación ultravioleta, gracias a unas células sensoriales denominadas "conos dobles".

La acción de esa estructura les permite identificar los lugares con mayor incidencia de la luz para tomar el sol, con lo cual optimizan la producción de vitamina D. En cambio la carencia de células receptoras de luz o bastones, hace que su visión sea mala en la penumbra.

Iguánido al fin, posee también el llamado ojo parietal, ubicado en la porción superior de la cabeza. Se trata de un órgano fotodetector blanco provisto de una retina poco desarrollada y un cristalino que no puede ver imágenes pero sí detectar movimiento y variaciones de luz.

Es un animal herbívoro. No es muy frecuente, pero alguna que otra ingiere restos de cangrejos, peces y aves. En isla Magüeyes en Puerto Rico donde hay una gran población asilvestrada de iguanas cubanas se constató un único evento de canibalismo, por parte de una hembra que después de perseguirla y capturarla se comió una cría de su especie. Para los investigadores este episodio bien pudiera estar relacionado con una alta densidad poblacional de estos lagartos en el territorio.

A los dos o tres años alcanza su madurez sexual. Antes de conseguirla los machos son gregarios, pero según envejecen van volviéndose agresivos y muy territoriales. Defienden sus predios de forma enérgica cuando están compitiendo por las hembras. Estas en cambio se toleran más entre sí, ¡Claro! Mientras no hayan puesto huevos.

Suelen hacer sus nidos en las concavidades que han sido abandonadas por los cocodrilos, cuando ya las crías de estos han salido de sus huevos y abandonado el refugio. Si no hay cocodrilos, los excavan en la arena de las playas.

Hoy habita en regiones rocosas costeras dispersas en 4000 islotes del archipiélago cubano que bordean a la isla principal, así como en la Península de Guanahacabibes, Reserva de la Biosfera; en los refugios de vida silvestre Hatibonico, Delta del Cauto y en la reserva ecológica Punta Negra-Quemados, entre otras.

Se estima que la población actual de iguanas cubanas en el país antillano es de entre 40 mil y 60 mil ejemplares, y en Magüeyes se remonta a los 1000. La especie ha sido clasificada como "Vulnerable" en la lista negra de la UICN, pero afortunadamente se recupera y crece con éxito.